Querida lectora,
En un mercado saturado de opciones y promesas, entender qué significa realmente «natural» y «ecológico» en el mundo de la cosmética puede ser confuso. Con etiquetas que proclaman virtudes naturales y ecológicas, es crucial desentrañar estos términos para tomar decisiones informadas sobre los productos que elegimos para nuestra piel y nuestro cuerpo.
¿Qué es la cosmética natural?
La etiqueta «cosmética natural» se refiere a productos que contienen una alta proporción de ingredientes derivados de fuentes naturales, como plantas y animales. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el término «natural» no está regulado oficialmente, lo que significa que cualquier empresa puede etiquetar sus productos como «naturales» sin estar sujetos a estándares específicos.
¿Qué es la cosmética ecológica?
Por otro lado, la «cosmética ecológica» va un paso más allá al no solo priorizar ingredientes naturales, sino también enfocarse en prácticas respetuosas con el medio ambiente durante todo el proceso de producción. Esto incluye el uso de ingredientes orgánicos certificados, procesos de fabricación sostenibles y embalajes eco-responsables.
Principales diferencias
Ingredientes certificados: La cosmética ecológica a menudo requiere que la mayoría de sus ingredientes sean orgánicos certificados, mientras que la cosmética natural puede contener una variedad de ingredientes naturales, pero no necesariamente orgánicos.
Procesos de fabricación: La cosmética ecológica se produce utilizando métodos que minimizan el impacto ambiental, como la energía renovable y la reducción de residuos. En contraste, la cosmética natural puede no tener requisitos específicos en cuanto a prácticas de fabricación sostenibles.
Pruebas en animales: Tanto la cosmética natural como la ecológica suelen abstenerse de realizar pruebas en animales, pero este es un punto crucial que se debe verificar en las etiquetas y la política de la empresa.
Porcentaje de ingredientes orgánicos: La cosmética ecológica a menudo requiere un porcentaje mínimo de ingredientes orgánicos certificados para calificar como tal, mientras que la cosmética natural puede tener un porcentaje más bajo o no tener requisitos específicos.
Advertencia sobre la etiqueta «natural»
Es esencial tener en cuenta que la presencia de la palabra «natural» en la etiqueta de un producto no garantiza su seguridad ni su origen. Algunas empresas pueden utilizar esta etiqueta de manera engañosa para comercializar productos que contienen ingredientes potencialmente dañinos. Por lo tanto, es importante leer detenidamente la lista de ingredientes y buscar certificaciones de terceros que respalden las afirmaciones de naturalidad y ecología.
En conclusión, al elegir productos de cuidado personal, es fundamental ir más allá de las etiquetas llamativas y profundizar en la composición y las prácticas de producción. Optar por cosméticos ecológicos puede no solo beneficiar nuestra piel y nuestro bienestar, sino también contribuir a la sostenibilidad del planeta.
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Virginia Quetglas
Diplomada en Naturopatía, Creadora de la escuela El Rincón de Nana y de los Cursos “Cocina Consciente” y “Mujer Consciente”
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