Querida lectora,
Hoy quiero hablarte de un secreto muy especial para mejorar nuestra calidad de vida: la contemplación y la gratitud. Te puedo asegurar que estas prácticas pueden transformar nuestro bienestar emocional y mental de manera profunda.
La contemplación es una práctica que nos invita a frenar el ritmo acelerado de la vida moderna. Esta semana justo te comentaba que vivimos en una sociedad donde todo se consume rápidamente, desde los audios que nos mandan, hasta nuestras propias comidas. Esta aceleración constante nos priva de los detalles, y lo más hermoso de la vida está precisamente en esos pequeños detalles.
Cuando contemplamos, nos permitimos saborear la vida. Puede ser algo tan sencillo como detenernos a observar un paisaje, escuchar a los pájaros o admirar una flor o el vuelo de un pajarillo. Estos momentos de quietud y atención plena nos ayudan a reconectar con nosotros mismos y a encontrar paz interior.
La gratitud es otra práctica poderosa. Dar gracias por las cosas buenas que nos suceden es una forma de honrar la vida y de recordar lo privilegiadas que somos. Ya se que soy muy pesada con lo de la gratitud pero es que el cerebro es muy agradecido y responde positivamente cuando nos tomamos el tiempo para reconocer nuestras bendiciones. La gratitud es la memoria del corazón, y cultivar esta práctica puede mejorar significativamente nuestro bienestar emocional. Si eres una persona creyente, como yo, aprovecha cualquier momento para orar y dar gracias por vivir un día más, por la comida que vas a tomar, por tener trabajo, amor, un techo, o tantas y tantas cosas que podemos agradecer al Creador.
Además, la gratitud y la contemplación nos ayudan a salir del modo alerta en el que vivimos constantemente. Recuerda que no estamos diseñadas para estar siempre en modo amenaza. Nuestro organismo y nuestra mente necesitan momentos de pausa, donde podamos procesar nuestras emociones y reflexionar.
No tengas miedo de dedicar tiempo a la contemplación y la gratitud. Estos momentos son esenciales para tu salud emocional y mental. En mi blog y en mi perfil de Instagram, encontrarás más consejos sobre cómo llevar una vida consciente y saludable. Estoy aquí para responder a tus dudas y recibirte en mis talleres, que se reanudarán después del verano.
¿Qué te parece si mañana te comparto una receta muy sencilla, saludable y deliciosa ideal para este veranito? Déjame un comentario para saber sobre qué te gustaría que te escribiera los próximos días. Al fin y al cabo, lo hago para ti. Así que hazme saber qué necesitas y será un placer darte aquello que ahora mismo precisas.
Gracias por confiar en mí como tu guía en este camino hacia una vida más natural y saludable.
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¡Que el amor, la paz, la salud y la felicidad te acompañen siempre!
Virginia Quetglas
Diplomada en Naturopatía y creadora de la escuela El Rincón de Nana y de los cursos “Cocina consciente” y “Mujer consciente”
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