Querida lectora:
¡Qué alegría que sea viernes! Como ya sabes, me encanta aprovechar este día para compartir recetas deliciosas y prácticas que puedes preparar rápidamente y combinar con una gran variedad de platos. Hoy te traigo no una, sino dos recetas de pesto que, además de ser riquísimas, son súper versátiles. Ya sea que las uses para darle vida a una simple pasta cocida, enriquecer una ensalada o incluso darle un giro a una tortilla, estos pestos se convertirán en tus aliados favoritos en la cocina.
Y lo mejor de todo es que ambas recetas utilizan ajo crudo, lo que significa que obtendrás todos sus beneficios medicinales en cada bocado. El ajo crudo es una joya para nuestra salud, y estas recetas son una forma deliciosa de incorporarlo en tu dieta diaria.
Pesto tradicional genovés
Esta es la receta auténtica del pesto genovés, una salsa clásica que no necesita presentación. Su combinación de albahaca fresca, piñones, queso Parmesano y Pecorino, y por supuesto, ajo crudo, es simplemente irresistible. Perfecta para acompañar tus platos favoritos o para darle un toque especial a una receta sencilla.
Ingredientes
- 50 g de hojas de albahaca fresca
- 60 ml de aceite de oliva virgen extra
- 30 g de piñones
- 2 dientes hermosos de ajo
- 50 g de queso Parmesano Reggiano rallado
- 20 g de queso Pecorino Romano rallado
- Una pizca de sal marina (al gusto)
Elaboración
En mortero
Si buscas autenticidad, machaca los dientes de ajo con una pizca de sal gruesa en un mortero hasta obtener una pasta suave.
Añade los piñones
Incorpora los piñones y continúa machacando hasta que estén bien integrados.
Albahaca y quesos
Agrega las hojas de albahaca poco a poco, machacándolas con movimientos circulares para liberar todos sus aceites esenciales. Luego, añade los quesos rallados y mezcla bien.
Aceite de oliva
Finalmente, vierte el aceite de oliva en un hilo fino mientras sigues mezclando hasta que la salsa esté bien emulsionada.
Este pesto es perfecto para mezclar con pasta, untar en pan, o como base para una deliciosa vinagreta. ¡Las posibilidades son infinitas!
Pesto vegano con anacardos y ajo asado
Si el ajo crudo es un poco fuerte para ti o si prefieres una opción vegana, esta receta es ideal. El ajo asado le da un sabor suave y delicioso, y los anacardos sustituyen al queso, proporcionando una textura cremosa que te encantará.
Ingredientes
- 25 g de hojas de albahaca fresca
- 1 cabeza de ajos
- 200 g de anacardos crudos
- 100 g de espinacas baby frescas
- 2 cucharadas de zumo de limón
- 1 cucharadita de sal
- 60 ml de aceite de oliva virgen extra
Elaboración
Asa los ajos
Asa una cabeza de ajos en el horno a 190 °C durante 35 minutos. Una vez asados y enfriados, extrae la pasta de ajo apretando cada diente.
Procesa los ingredientes
En un procesador de alimentos, combina la pasta de ajo con la mitad de los anacardos. Procesa a baja potencia hasta que estén ligeramente picados.
Añade espinacas y albahaca
Agrega las espinacas y la albahaca, y procesa nuevamente hasta que todo esté bien picado.
Incorpora el zumo de limón y el aceite
Sin subir la velocidad, añade el zumo de limón y la sal. Luego, vierte el aceite de oliva poco a poco mientras procesas hasta que la mezcla sea homogénea.
Textura final
Por último, añade los anacardos restantes y pulsa unas cuantas veces para picarlos en trozos grandes, dándole al pesto una textura más espesa.
Este pesto es maravilloso para servir con crudités, como relleno de tortillas, o incluso como un aderezo para ensaladas. ¡No tiene límites!
Ambas recetas son una excelente base para experimentar y adaptarlas a tu gusto. Puedes jugar con las cantidades de ajo, cambiar los frutos secos, o incluso agregar otros ingredientes como rúcula o tomates secos para darle un giro diferente.
Precauciones e interacciones
Aunque el ajo es un alimento medicina increíblemente beneficioso, es importante tener en cuenta algunas precauciones, especialmente si se consume en grandes cantidades o en forma de suplementos concentrados. El ajo puede actuar como un anticoagulante natural, por lo que si estás tomando Sintrom, medicamentos anticoagulantes, o antiagregantes plaquetarios, es recomendable que consultes con tu médico antes de incrementar significativamente tu consumo de ajo. Además, algunas personas pueden experimentar molestias gastrointestinales como ardor de estómago o hinchazón al consumir ajo crudo. Como siempre, escucha a tu cuerpo y ajusta tu consumo según lo que mejor te siente. Por último, ten en cuenta que el ajo puede interactuar también con otros medicamentos, así que es aconsejable consultar con un profesional de la salud si tienes alguna condición médica o estás bajo tratamiento.
Espero que disfrutes preparando y degustando estas recetas tanto como yo. Si las pruebas, me encantaría que me contaras cómo te han salido y cómo las has utilizado en tus platos. Como siempre, tus comentarios me motivan a seguir creando y compartiendo.
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¡Que el amor, la paz, la salud y la felicidad siempre te acompañen!
Virginia Quetglas
Diplomada en Naturopatía y creadora de la escuela de cocina consciente El Rincón de Nana
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