Beber agua, bebida isotónica, comprar agua de calidad

La mejor agua para tu organismo

Queridas alumnas,

Hoy vamos a sumergirnos aún más en el apasionante mundo de las opciones de hidratación para explorar las diferencias entre el agua, el agua con gas y las bebidas isotónicas. ¡Preparada para tomar decisiones informadas y mejorar aún más tu bienestar!

Agua, tu aliada natural

El agua, el líquido esencial para la vida, es nuestro punto de partida en este curso tan completo. Pero no todas las aguas son iguales. Y por ello aquí te presento algunos puntos clave para tener en cuenta al elegir tu fuente de hidratación:

Calidad y mineralización: Opta por un agua fina, con bajos niveles de sales minerales y libre de contaminantes. Las aguas bicarbonatadas cálcicas son una excelente elección, ¡no sódicas! y de baja mineralización. Las aguas de media o baja mineralización, son preferibles con un residuo seco inferior a 500 mg/litro. Cuanto menos residuo, más ligera y refrescante resulta en boca.

Agua del grifo o de botella de plastico
A veces es difícil tomar decisiones para ello lo mejor es estar informada

Botella o grifo: Las aguas naturales embotelladas suelen ser de calidad, incluso si provienen de manantiales menos conocidos. Sin embargo, las aguas potabilizadas tienen una calidad inferior debido a su proceso de tratamiento. Si eliges agua del grifo, considera usar un filtro para mejorar su calidad. Y si la compras embotellada enseguida que puedas traspásala a un contenedor de vidrio o cristal, como una jarra o similar.

Beber agua filtrada, ya sea de una jarra Brita o de un sistema de ósmosis inversa, puede ser una opción saludable para mejorar la calidad del agua que consumes. Ambos métodos de filtración tienen sus propias ventajas y consideraciones:

Jarra Brita:
Las jarras de filtración como Brita utilizan un filtro de carbón activado para eliminar impurezas y sabores desagradables del agua del grifo. Estos filtros pueden eliminar contaminantes como cloro, metales pesados y algunos compuestos orgánicos, lo que puede mejorar significativamente el sabor y la calidad del agua. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los filtros de carbón activado pueden no ser tan efectivos para eliminar ciertas sustancias, como algunos minerales y productos químicos específicos. Además, los filtros de las jarras deben cambiarse periódicamente según las instrucciones del fabricante para mantener la eficacia del proceso de filtración.

Sistema de Ósmosis Inversa:
Los sistemas de ósmosis inversa son considerados uno de los métodos más efectivos para purificar el agua. Estos sistemas utilizan una membrana semipermeable para eliminar una amplia gama de contaminantes, incluidos minerales, productos químicos, metales pesados y microorganismos. El resultado es un agua muy purificada y libre de muchas impurezas. Sin embargo, es importante mencionar que los sistemas de ósmosis inversa también pueden eliminar algunos minerales beneficiosos del agua, lo que podría requerir la adición de minerales a través de la dieta si se consume agua purificada de manera constante. Por ejemplo, incluyendo un tapón de agua de mar en la jarra de agua, aumentando el consumo de vegetales o incluso suplementándonos.

En resumen, tanto la jarra Brita como el sistema de ósmosis inversa pueden ser opciones saludables para mejorar la calidad del agua que consumes. La elección entre ellos dependerá de tus necesidades específicas y preferencias. Si estás buscando una filtración básica y mejor sabor, la jarra Brita podría ser adecuada. Si buscas una purificación más completa, el sistema de ósmosis inversa podría ser la mejor opción, aunque debes considerar la posible eliminación de minerales beneficiosos. Recuerda seguir las recomendaciones del fabricante y mantener los equipos limpios y en buen estado para garantizar una filtración efectiva y segura.

Agua con gas: Las aguas carbonatadas pueden ser excelentes para mejorar la digestión cuando tenemos un problema muy puntual, pero no solucionarán un problema crónico ni es recomendable su consumo habitual ya que puede debilitar tu capacidad digestiva, generar hinchazón, gases… además de que erosiona el esmalte dental. Si es posible, elimina su consumo o úsala puntualmente para elaborar refrescos más naturales que los convencionales.

¿Agua o bebida isotónica?

Ahora, hablemos de las situaciones en las que podrías considerar opciones más allá del agua pura:

Pérdidas importantes: Después de ejercicio intenso, calor, sudoración profusa o diarreas, es posible que necesites más que agua. Las bebidas isotónicas son una opción valiosa en estos casos, ya que reponen no solo líquidos, sino también las sales que se han perdido junto con el agua.

El poder de la adición: Si optas por las bebidas isotónicas, recuerda que puedes incorporar una pequeña cantidad de sales (sal marina sin refinar o sal del Himalaya), pero ahora también te animo a incluir un chorrito de zumo de limón natural, de esta forma añadimos ácidos orgánicos como el cítrico, y una pequeña cantidad de panela para reponer energía. Ahora ya tenemos una bebida isotónica completa.

Alternativas sabrosas y beneficiosas

Además de las bebidas isotónicas, tienes otras opciones sabrosas para mantenerte hidratada:

Caldos Vegetales: Estos caldos son una excelente manera de rehidratarte y aportar sales esenciales. Además, te brindan nutrientes beneficiosos y pueden ser una opción reconfortante cuando hace frío.

Tisanas y jugos de vegetales: Las tisanas son infusiones de hierbas y especias que no contienen cafeína. Opta por opciones como la menta, la manzanilla, la maría luisa, la melisa o el té rooibos. Ahora ya tenemos varias recetas pero durante el curso aprenderemos muchas más y te animo a realizar tus propios experimentos con tus plantas favoritas. Los jugos de frutas son ricos en ácidos orgánicos y vitaminas, y si deseas beber una cantidad generosa de líquidos, puedes diluirlos con agua a partes iguales. En el curso ahondaremos en este tipo de bebidas para que les saques el mejor partido sin abusar de sus azúcares. Pero por supuesto que si quiere agua de excelente calidad, repleta de vitaminas y minerales sin excesos de azucares, tienes que descubrir los zumos de vegetales como el apio, el pepino o el tomate, entre muchos otros (hinojo, manzana Granny Smith, col, remolacha, zanahoria…). Son envases naturales (libres de plásticos) que si los eliges ecológicos también están libres de pesticidas y tóxicos (por lo que no necesitas filtros para eliminar sus tóxicos) y están repletos de nutrientes. Y si en lugar de extraer su los batimos con agua conseguiremos lo que yo llamo, un falso zumo. La sensación es la de beber un zumo pero no prescindimos de su fibra que tantos beneficios nos otorga, como alimentar a nuestra microbiota, actuando como prebiótico.

No hay mejor agua que la que extraemos de los vegetales

Al final del día, recuerda que tu elección de hidratación debe estar alineada con tus necesidades y circunstancias individuales. Cada sorbo cuenta en tu viaje hacia un bienestar óptimo. ¡Sigamos aprendiendo y tomando decisiones inteligentes juntas!

Espero ver la foto de tu práctica porque lo que se oye se olvida, lo que se ve se recuerda y solo lo que se practica se aprende.

¡Qué la salud te acompañe!

Virginia Quetglas
Naturópata y Profesora del Curso “Hogar Consciente

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