Vamos a hacer lo que harían nuestras abuelas, «cocina de aprovechamiento«. Podríamos hacer una crema de verduras, una pizza, un caldo… pero, ¿qué tal unas hamburguesas “súpermegasanas”?
Tradicionalmente las prepararíamos con carne picada pero, como ya hemos comentado en otras ocasiones, pudiendo tomar proteínas vegetales más sanas que las animales, ¿por qué vamos a causar sufrimiento a los animales y nosotros mismos ingiriendo grasas saturadas, colesterol, antibióticos, hormonas…?
Evidentemente que sabes lo que es una hamburguesa y no importa que te explique mucho, pero quizás nunca has imaginado que esta podía ser vegetal. Las hamburguesas vegetales, son una mezcla de verduras, hortalizas, legumbres… a las que les daremos la famosa forma redonda, para pasarlas por la sartén, la plancha o mejor, calentar en el horno. Pero, ¿por dónde empezamos?
Pues por elegir los ingredientes. Miramos la nevera y seleccionamos las verduras que le van a proporcionar sobretodo sabor y aroma. Si utilizas remolacha, además conseguirás ese color sanguinolento que te recordará a la XXL de la hamburguesería de toda la vida, si es que aún sigues emocionalmente ligado a la carne. Con unas legumbres como garbanzos o unos cereales como la avena, conseguirás un buena textura, ya que necesitas consistencia para poder manipularla. Un poco de líquido como agua o caldo y aceite para que tenga un punto cremoso, y pan rallado, harina o gluten de trigo para coexionar todos los ingredientes. Y para terminar, las imprescindibles especias; orégano, perejil, albahaca, curry… Las que más te gusten.
Cuando tengas los ingredientes seleccionados, mételos en una fuente y remueve o incluso amasa todo con las propias manos, que es como yo lo hago, hasta obtener una masa consistente. Déjalo un par de horas mínimo en la nevera para que se aglutine bien y ya está listo para pasar por el pan rallado, o la harina que prefieras, aunque este paso no es necesario, te ayudará a que no se deshagan con el calor.
Si haces mucha cantidad, podrás congelar algunas para tener a mano una comida rica y sana para esos días en que no tienes tiempo o estás cansado.
Así que repasamos:
Un truquillo antes de meter la masa en el molde es poner dentro un poco de pan rallado y así no se quedarán pegadas.
¿Te animas a hacer la tuya y compartir conmigo el resultado? Pues súbelo a mi página de facebook «El Rincón de Nana by Virginia Quetglas»
Se ven muy buenas! . Gracias por compartir la receta, las haré! .
Gracias Janina! Me encantará ver una foto cuando las pruebes y que me cuentes qué tal te han quedado. ¡Disfrútalo!