Querida lectora:
Las vacaciones de verano son el momento ideal para enfocarnos en mejorar nuestros hábitos digestivos, aprovechando este tiempo libre para establecer rutinas saludables que nos acompañarán durante todo el año. Cuidar de nuestro sistema digestivo no solo mejora nuestro bienestar general, sino que también ayuda a prevenir condiciones como el ya tan famoso Síndrome del Intestino Delgado con sobrecrecimiento bacteriano más conocido como SIBO, que puede causar síntomas como hinchazón, dolor abdominal y malabsorción de nutrientes.
Durante agosto, me tomaré unas vacaciones de escribir en el blog, pero seguiré compartiendo contenido en Instagram. Si aún no estás suscrita al blog o no me sigues en Instagram, ¡es un buen momento para hacerlo! Y además a la vuelta, en septiembre, comenzaré con mis nuevos talleres, que son un punto de encuentro agradable para seguir mejorando nuestro bienestar.
Cómo activar el sistema de limpieza del intestino para evitar el SIBO y sus síntomas
El SIBO es una condición en la que se produce un aumento excesivo y por lo tanto un desequilibrio de bacterias en el intestino delgado. Afortunadamente, hay medidas que se pueden tomar para activar el sistema de limpieza del intestino y reducir el riesgo de SIBO y sus síntomas.
Cómo funciona el sistema de limpieza digestivo
El sistema de limpieza digestivo, también conocido como el sistema de limpieza intestinal, elimina las toxinas, residuos y bacterias no deseadas que se acumulan en el intestino. Este proceso es esencial para el funcionamiento óptimo del sistema digestivo y la salud general del cuerpo.
Estrategias para activar el sistema de limpieza del intestino
Dieta adecuada: una dieta equilibrada es clave para mantener un sistema digestivo saludable. Evita alimentos que fomenten el crecimiento bacteriano no deseado, como azúcares, carbohidratos fermentables (lactosa y fructosa), almidones y fibra insoluble.
Probióticos y prebióticos: los probióticos, presentes en alimentos como el kéfir, ayudan a mantener el equilibrio bacteriano en el intestino. Los prebióticos, como el ajo, cebolla, espárragos y plátanos verdes, alimentan a las bacterias beneficiosas.
Suplementos naturales: Suplementos como el aceite de orégano, el ajo, la berberina y el aceite esencial de menta pueden mejorar la función intestinal y reducir el riesgo de SIBO. Consulta a un profesional de la salud antes de tomarlos.
Reducción del estrés: el estrés afecta negativamente la función digestiva. Practica técnicas de relajación como la respiración profunda para mejorar la salud intestinal.
Antibióticos y tratamiento: en casos de SIBO diagnosticado, un buen profesional de la salud puede recomendar antibióticos específicos naturales que dan muy buenos resultados sin los efectos secundarios de los fármacos que se suelen recetar en estos casos, y que solo recomiendo cuando los naturales no den buen resultado. Tanto en un caso como en el otro es esencial seguir las indicaciones médicas y complementar el tratamiento con cambios en la alimentación y estilo de vida para evitar recurrencias.
Qué altera el sistema de limpieza digestivo y favorece el SIBO
Dieta inadecuada: el consumo excesivo de carbohidratos fermentables puede proporcionar un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias no deseadas en el intestino delgado.
Disminución de la motilidad intestinal: la motilidad intestinal adecuada es fundamental para un sistema de limpieza digestivo efectivo. Su disminución puede llevar a la acumulación de bacterias.
Daño en la barrera intestinal: Factores como el estrés crónico, el consumo excesivo de alcohol, medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE’s), infecciones intestinales o enfermedad celíaca pueden debilitar la barrera intestinal.
Trastornos anatómicos o estructurales: Trastornos como estenosis, obstrucciones o adherencias intestinales pueden alterar el flujo normal de alimentos y residuos, facilitando la proliferación bacteriana.
Uso indiscriminado de antibióticos: Puede alterar la flora intestinal y favorecer el desarrollo de SIBO.
Remedios naturales para potenciar la limpieza digestiva y evitar el SIBO
Té de menta: mejora la motilidad intestinal y alivia el malestar gastrointestinal.
Infusión de jengibre: potente antiinflamatorio con propiedades digestivas.
Zumo de aloe vera: alma la irritación y la inflamación en el tracto gastrointestinal.
Infusión de manzanilla: reduce la inflamación y mejora la motilidad intestinal.
infusión de hinojo: alivia la hinchazón y los gases intestinales.
Vinagre de sidra de manzana: mejora la digestión y previene el crecimiento bacteriano.
Alimentos y bebidas probióticas caseras: alimentos fermentados como el chucrut, el kimchi y la bebida de kombucha mantienen una flora intestinal saludable. Aprende a hacerlos en casa ya que los industriales suelen estar pasteurizados y por lo tanto han perdido sus propiedades.
Activar el sistema de limpieza del intestino es fundamental para prevenir el SIBO y sus síntomas. Una dieta adecuada, probióticos, reducción del estrés, mantener la motilidad intestinal y evitar el uso indiscriminado de antibióticos son esenciales para un sistema digestivo saludable. Los remedios naturales como el té de menta, jengibre, aloe vera y otros mencionados pueden potenciar la limpieza digestiva y mejorar la salud intestinal. Consulta a un profesional de la salud antes de hacer cambios significativos en tu dieta o tratamiento médico.
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Virginia Quetglas
Diplomada en Naturopatía y creadora de la escuela El Rincón de Nana y de los cursos “Cocina consciente” y “Mujer consciente”
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