Hoy, mientras estaba paseando por el centro de Suecia, Raquel, una de mis queridas alumnas me ha enviado por whatsapp una foto de la merienda que uno de los peques había llevado al centro donde ella trabaja. Me ha encantado ver cómo, con todo lo que lleva aprendido en clase, ya es capaz de discernir cuándo un producto es saludable para su hija por mucho que el marketing y la publicidad intenten engañarla.
Y es que el producto en cuestión es «El ABC de la merienda Parmareggio«. Como reza en el paquete, en su página web y en la información que podemos encontrar por internet sobre este aparentemente maravilloso producto para las mamás que se preocupan por la alimentación de sus hijos, se trata de una merienda saludable y equilibrada para los niños.
Y es que es cierto que una de las preguntas que a menudo, por no decir a diario, nos hacemos las madres es ¿cómo debemos alimentar a nuestros hijos?. Estamos constantemente expuestas a publicidad de todo tipo, que nos indica que la leche de vaca es ideal e imprescindible para su crecimiento, que los cereales refinados les aportan energía para afrontar el día, o que determinados yogures bebibles aumentan sus defensas. Pero, ¿es esto verdad?
¡Analicemos este producto en cuestión! ABC Parmareggio está compuesto por palitos de pan (hecho con harina refinada que crea un pico glucémico en el organismo que a su vez provocará nervios, ansiedad… y un rápido «subido» seguido de su consecuente «bajón»…), un batido de fruta 100% (tendría que analizar la etiqueta en cuestión del batido pero si realmente es única y exclusivamente fruta batida sería lo único interesante de esta merienda) y queso (una pieza de grasa con sal que además provoca mucosidad en nuestro pequeños). ¿Una merienda saludable? En su publicidad no solo evitan la información que yo he comentado entre paréntesis sino que alegan que los primeros nos proporcionarán energía y el último calcio. ¡Madre del amor hermoso! ¿Puede haber unos hidratos y una fuente de calcio peor en el mundo?
Me alegro de servir de ayuda para que muchas mamás se hayan quitado la venda de los ojos y tengan el criterio y los conocimientos suficientes para conocer las fuentes saludables de estos y otros nutrientes.
¿Queréis una fuente de hidratos de carbono saludables para que vuestros hijos tengan energía? Dadles arroz integral, quinoa, trigo sarraceno, mijo, amaranto, teff… Por ejemplo los deliciosos creps de trigo sarraceno con plátano y cacao que aprendemos a preparar en el primer nivel de cocina consciente. Además obtendrán una energía «limpia» que no les generará problemas de atención, excitación, concentración, etc.
O ¿queréis una fuente de calcio sin las desventajas de los lácteos? Pues añadid todos los días frutos secos y crucíferas en sus meriendas. ¿Qué tal si les preparamos una bebida vegetal con harina de algarroba?, ¿o un irresistible batido de pera y brócoli con cacao?
Aquí os dejo un vídeo por si queréis ver cómo se lo pasan los peques en mis talleres de cocina saludable, donde no solo cocinan sino que se lo comen todo, ¡hasta las migas!
Aprende a través de mis cursos y talleres o viniendo a mi consulta a tener el criterio y los conocimientos que una madre necesita para seleccionar los verdaderos alimentos para sus hijos y que no te tomen más el pelo con anuncios llenos de mentiras…
Y mientras aprendes enséñales a disfrutar simplemente de la fruta, el mejor tetabrik del mundo cargado de agua de excelente calidad, vitaminas, minerales, fibra… y además es económica, fácil de transportar y muy variada. ¿Qué más se puede pedir?